Si estás buscando un DAW gratuito con opciones avanzadas de mezcla, probablemente te hayas encontrado con Cakewalk by BandLab y Studio One Prime. Ambos prometen calidad profesional sin coste alguno, pero ¿cuál de los dos es realmente la mejor opción para mezclar?
La respuesta no es tan obvia como parece. Uno de ellos tiene herramientas más avanzadas, mientras que el otro ofrece un flujo de trabajo más intuitivo. Pero hay un detalle clave que muchos pasan por alto y que puede marcar la diferencia en tu sonido final. ¿Quieres saber cuál es? Sigue leyendo.
¿Qué es mejor Cakewalk o Studio One Prime?
Flujo de trabajo en la mezcla: ¿Cuál te permite trabajar más rápido?
Uno de los aspectos más importantes al mezclar es el flujo de trabajo. Un DAW que te haga perder tiempo buscando herramientas o ajustando parámetros de forma tediosa puede arruinar tu proceso creativo.
- Cakewalk by BandLab sigue la filosofía de las consolas de mezcla tradicionales. Su mezclador es personalizable, con faders, buses auxiliares y un enrutamiento flexible, ideal para quienes vienen del mundo del hardware.
- Studio One Prime, en cambio, apuesta por la simplicidad y rapidez. Su entorno visual es más moderno y optimizado para que todo esté al alcance sin necesidad de navegar por múltiples ventanas.
¿Pero cuál de los dos permite un flujo de trabajo más eficiente para la mezcla? Eso dependerá de tu experiencia y preferencias, pero hay una gran diferencia en sus herramientas de ecualización y dinámica que puede hacerte cambiar de opinión.
Ecualización y procesamiento: ¿Cuál ofrece más control sobre el sonido?
Si la ecualización es clave en tu proceso de mezcla, debes saber que estos DAWs no incluyen las mismas opciones.
- Cakewalk by BandLab incorpora un ecualizador gráfico en cada pista, lo que te permite esculpir el sonido sin necesidad de cargar plugins externos. Además, su ProChannel ofrece módulos avanzados de ecualización y compresión, algo que normalmente solo se encuentra en DAWs de pago.
- Studio One Prime, por otro lado, no incluye EQs ni compresores dedicados en cada canal, lo que significa que deberás recurrir a soluciones externas si quieres un control más detallado.
Este es un punto crítico. Si buscas un DAW gratuito con herramientas de mezcla integradas, uno de estos programas tiene una ventaja evidente.
Plugins y efectos integrados: ¿Cuál te da más herramientas desde el inicio?
Los efectos nativos de un DAW pueden marcar la diferencia entre una mezcla profesional y una que suene amateur.
- Cakewalk by BandLab ofrece una gama completa de efectos, incluyendo reverb, delay, compresores y saturadores dentro de su suite ProChannel. Además, permite cargar plugins VST gratuitos, lo que abre un abanico de posibilidades casi infinito.
- Studio One Prime tiene un punto débil aquí: no permite el uso de plugins VST externos. Esto significa que estás limitado a los efectos nativos, que aunque son de buena calidad, pueden quedarse cortos si buscas un sonido más pulido y profesional.
Si tu objetivo es una mezcla con profundidad, control y variedad de efectos, hay un claro ganador en este apartado.
¿Cuál DAW gratuito es mejor para mezcla Cakewalk o Studio One Prime?
Si tu prioridad es la mezcla, la decisión es bastante clara:
✅ Cakewalk by BandLab es el DAW gratuito más completo para mezcla. Con su ecualización integrada, ProChannel y compatibilidad con VSTs, ofrece herramientas que rara vez se encuentran en software sin coste.
⚠️ Studio One Prime sigue siendo una opción sólida, especialmente si valoras la simplicidad y facilidad de uso, pero sus limitaciones en efectos y plugins pueden hacer que necesites buscar alternativas para conseguir un sonido más profesional.
Si este artículo te ha sido útil, no olvides revisar nuestra comparativa de DAWs sin coste en el artículo principal.
1980, Barcelona, España.
Ingeniero de sonido, mezcla y mastering.
Guitarrista y compositor de música.
Ha lanzado 4 álbumes, 9 EPs y decenas de sencillos de diferentes géneros musicales.
También ha mezclado, masterizado y grabado para innumerables artistas independientes.
Fotógrafo y dibujante por afición.